Tengo una ahijada de 10 años a la que le "encanta" el chocolate. Por Pascua es muy típico regalar a los ahijados una rosca o un huevo de chocolate, pero este año mi ahijada vio en una confitería de la zona una maqueta de chocolate de la iglesia del pueblo. Le pregunté qué prefería ella de regalo de Pascua: la rosca o el huevo de chocolate, y su contestación fue "una Catedral de chocolate".
Una catedral iba a ser mucho para una novata en repostería pero ¿por qué no intentar una casita?
Una catedral iba a ser mucho para una novata en repostería pero ¿por qué no intentar una casita?
Días después tenía en casa el folleto del Lidl donde tenían en oferta una Gallina Gigante de chocolate, y de ahí salió la idea de la granja. Cuando fui al Lidl a por la Gallina encontré también los pollitos, las ovejas, el conejo, kit kat (para la verja), filipinos.... Sólo me faltaba el chocolate para fundir. Como sería el ingrediente principal no me arriesgué a comprar marcas que no conocía y compré 4 tabletas de chocolate negro NESTLÉ postres y una de chocolate blanco Milka.
Para el montaje de la granja conté con la colaboración de mi ahijada. Sabía que lo iba a disfrutar muchísimo y así fue: pasamos una mañana muy divertida.
¿Y el lago azul? Seguro que muchos lo estáis pensando. Es chocolate blanco fundido con unas gotas de colorante alimentario azul (Vahiné), suelen tenerlo en todos los supermercados.
Esta es la primera vez que trabajamos con chocolate, pero no será la última. Fue tan divertido que ya estamos pensando en cómo hacerla en la próxima Pascua. No será una catedral pero ya se nos ocurrirá algo.
Chao
te ha salido todo precioso, me encsnta
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